lunes, 9 de febrero de 2009


No sé cuando ni como me volví tan amargada. Como será lo amarga que estoy que hasta las lágrimas me rehuyen y se quedan apretujadas en la garganta. Nada logra arrancar una sonrisa.No tengo. Hace años que no se reír. Ni llorar sé.

Y tanto empeño que le he hecho a la vida pero nadie me vio. Tanto me achiqué que quedé sin espacio para el corazón. Creo que ya no lo tengo.

Pero mi perro llora por mí, él siente lo que yo, y se apiada y me da sus lamentos para ocultar los mios. Hay algo que trae tristeza, hay un nido de ella, algo la alimenta y esta crece y crece, ya es adulta. Tiene nombre, tiene edad, la tristeza soy yo.


...después...

Esa persona estaba tan triste, tan triste, ¿Cómo nadie vio las señales? Talvez detenerse a preguntar era perder el tiempo. Total, ya pasaría lo que fuera. Deber ser temporal - pensaron - o debe ser así. Es su naturaleza.

De un Bipolar se puede esperar cualquier cosa - dijo uno - como displicente y sin preocupación. Lo que sea, es su destino. Para qué preguntar.


antonella bp

2 comentarios:

Cartas que nunca escribí dijo...

Estupendo, muy bueno...llega sin aristas al lector, y a mi, más allá de las pupilas.
Gracias por llegarte hasta mi buzón.

Wara dijo...

Cuanto más agobiados nos sentimos menos capaces somos de reaccionar, la crispación puede ser tan enorme que no encontramos las lágrimas ni un aliento. Pero, pese al dolor, hay que esperar...

Un saludo afectuoso. Visítame siempre que quieras, puedas, lo necesites... o sea sólo por azar.

Antonella Beatriz Cuevas Zambrano


Mi espacio para lo más intimo....



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Chile
Experta en SUDOKU (NIVEL 9) Adicta a los chocolates Fisicamente: baja, trigueña, blanca, media gordita, ojos cafe, ni fea ni bonita (normal) Espiritualmente: creyente, solidaria, amante de los animales, la naturaleza y la familia. Mentalmente: a veces inestable, buen genio, llevable, poco amistosa, tolerante. Me agrada escribir, leer, escuchar musica, ver documentales, y hacer mándalas de relajación.